7 Claves para enfrentar el confinamiento en pareja

pareja_confinamiento

Nadie dijo que fuera fácil… Mantener una relación de pareja es, la mayor parte del tiempo, algo agradable y placentero pero, a su vez, supone un gran esfuerzo: lidiar con las costumbres del otro, acoplar las diferentes formas de comunicarnos, repartir las tareas del hogar, distribuir el tiempo libre personal y compartido, … Todos estos aspectos que han de gestionarse con cuidado en la vida “normal” en pareja, en estos momentos de confinamiento pueden volverse más complicados todavía.

Todos tenemos en pareja una balanza interna entre lo positivo y lo negativo que nos orienta acerca de si las cosas se están haciendo mejor o peor y si, por lo tanto, merece la pena mantener la relación o no. Es como una cuenta bancaria que debemos cuidar que no se quede en números rojos. En esta etapa de confinamiento, los aspectos negativos de la balanza pueden ir en aumento (preocupación por cuestiones propias de la enfermedad, incertidumbre respecto al futuro, roces por la convivencia, frustración por no poder realizar actividades de ocio fuera de casa, …), por lo que, más que nunca, tenemos que poner todo nuestro empeño en generar y mantener aspectos positivos.

 

CLAVES PARA ENFRENTAR EL CONFINAMIENTO EN PAREJA

1- Comparte tiempo con tu pareja: sabemos que cada pareja tiene sus circunstancias, dependiendo de si el confinamiento incluye o no el cuidado de hijos o de personas mayores. Sin embargo, conviene en la medida de lo posible, proponer a tu pareja planes diferentes aunque sea dentro de casa: ver una obra de teatro, preparar una cena especial, bailar, preparar una sesión de cine casera con palomitas… Siempre pueden surgir ideas interesantes, ¡échale imaginación!

2- Técnica del “tiempo fuera”: tanto tiempo en casa puede provocar pequeños roces que por el hecho de no poder salir y no poder “airearnos” pueden convertirse en conflictos mayores. Permitirse cortar la discusión y pasar un rato a solas puede ayudarnos a calmar las emociones negativas, volviendo a colocar cada cosa en su sitio sin mayor repercusión.

3- Busca ratos a solas: poder disfrutar de un rato para ti mismo es importante. No necesariamente es imprescindible contar con un espacio físico para nosotros solos, con un rato de “desconexión” para estar con uno mismo es suficiente: leer un libro, una ducha relajada, escuchar música, hacer ejercicio físico, cocinar una receta apetecible o, incluso, tomar una infusión, pueden ser algunas ideas.

4- Fomenta la comunicación: en épocas difíciles es todavía más necesario poder expresar nuestras inquietudes, dudas y preocupaciones. Si te ves superado por la situación en ocasiones, busca un momento tranquilo para poder comentarlo con tu pareja. Preguntarnos el uno al otro de vez en cuando también puede facilitar la comunicación.

5- Sé detallista: seguimos intentando potenciar lo positivo en la balanza. Tener pequeños detalles cotidianos, que pueden parecer insignificantes o innecesarios, tiene un fuerte impacto: prepararle el desayuno, poner una canción especial para él/ella, preguntarle cómo está si percibes cierto malestar, hacer una vídeollamada sorpresa con algún familiar/amigo, planear una actividad diferente, …

6- “Pilla a tu pareja haciendo algo agradable”: esta herramienta se utiliza mucho en terapia de pareja. Consiste en poner el foco de atención en aquellas cosas positivas, gestos, detalles, etc., que tu pareja tiene contigo. Haz una lista de todos ellos, te ayudará a valorar todo lo que tu pareja sí que hace por ti y a reducir el impacto negativo de aquello en lo que crees que falla. Piensa que si estáis siendo detallistas, como comentábamos en el punto anterior, esta lista será más larga.

7- Organización en pareja: conviene dedicarle un tiempo a la organización semanal y al funcionamiento familiar: distribuir adecuadamente el tiempo dedicado al trabajo/teletrabajo (si lo hubiera), tareas domésticas, compra, tiempo de ocio, ejercicio físico, etc. Invertir tiempo en una mínima organización puede reducir desacuerdos, reproches y frustraciones posteriores.

 

Ante cualquier consulta no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

Te recordamos que esta entrada pertenece a un especial «Psicología y Coronavirus» donde puedes encontrar artículos relacionados.

 

COMPARTE EN: