
Tras unos días de relax, disfrutando de nuestras vacaciones, a todos nos cuesta regresar al trabajo y continuar con la rutina diaria, por lo que en ocasiones se produce el conocido como síndrome post-vacacional, también conocido como estrés o depresión post-vacacional.
El síndrome post-vacacional es un conjunto de síntomas que se manifiestan cuando nos incorporamos de nuevo a nuestras obligaciones, ya sean laborales, familiares o de estudio, tras un periodo de vacaciones.
La readaptación a la vida laboral después de las vacaciones incluye cambios de horarios, de obligaciones y de estilo de vida en su conjunto. Todo ello conforma un proceso normal de adaptación, que en algunos casos llega a ser más intenso y produce en quien los sufre molestias psicológicas y/o físicas. Algunos de estos síntomas pueden ser ansiedad, taquicardia, sensación de ahogo, tristeza, dolores de estómago o malestar físico y mental.
No te preocupes, no eres el único que está pasando por esta situación al volver al trabajo, es más común de lo que se piensa.
A continuación te dejamos algunos consejos que te ayudarán a superar el síndrome post-vacacional:
- Es imprescindible que afrontes la vuelta sin dramatizar, sencillamente afronta la realidad. Fíjate en lo positivo. A lo largo del día también nos pasan cosas buenas: unas palabras amables, unas risas a la hora del café, una llamada telefónica de alguien que se preocupa por nosotros… Agradecer esos pequeños detalles nos conecta con nuestra parte más humana y nos ayuda a tomar conciencia de todo lo bueno que nos rodea.
- Corta con los pensamientos recurrentes. Darle vueltas a la cabeza, una y otra vez, al mismo tema sólo incrementará tu ansiedad y tu sensación de falta de control.
- Debes tener muy claro que es un malestar propio de los primeros días y debes evitar darle demasiada importancia.
- En tus tareas diarias debes empezar de manera gradual, de menos a más intensidad, siempre intentando comenzar por las tareas más gratas.
- Organiza tu tiempo y diviértete. Del mismo modo que empleas un tiempo al día a trabajar, asegúrate de dedicar un tiempo también para ti mismo y las cosas que te gustan.
- Los primeros días, no estés pendiente del reloj mirando la hora cada momento. Quita todos los relojes que haya a tu alrededor para que la jornada no te resulte interminable.
- Practicar deporte de manera regular no sólo es bueno para la salud, sino que también contribuye a combatir el estrés. No lo dudes, el deporte es uno de tus mejores aliados para combatir la depresión post-vacacional.
- No olvides comer sano, durante las vacaciones uno pierde el control de lo que como, trata de volver a tener una dieta saludable.
- En el área profesional márcate nuevos objetivos en tu puesto laboral, te sentirás mucho más implicado en tu trabajo y te ayudará a levantarte de la cama con la ilusión propia de quien persigue un sueño.
En todo caso no debemos darle importancia a las sensaciones no agradables que podamos tener y darnos un tiempo para acostumbrarnos a la nueva situación, porque si no podemos caer en la depresión. Si en un mes aún no nos hubiéramos adaptado, sería recomendable consultarle a un psicólogo.